- noviembre 25, 2021
- Posted by: ISRACAM
- Categoría: Noticias
El misterio sobre cuándo se construyó la Torre de David finalmente comienza a esclarecerse.
Arqueólogos han estado excavando lo suficientemente profundo como para llegar a los cimientos del muro, brindando a los expertos más información para resolver el enigma sobre la datación original de la estructura.
«Sabemos que el muro de la fortaleza se remonta a la Edad Media, pero los estudiosos han estado debatiendo en qué período exactamente», dijo Noam Silverberg, director de la excavación en nombre de la Autoridad de Antigüedades de Israel. “En el pasado, se creía que los cruzados erigieron completamente el muro; más tarde se sugirió que fueron los mamelucos, al menos parcialmente».
La excavación ha estado acompañando los trabajos de construcción del nuevo pabellón del Museo Torre de David, cuya ceremonia de inauguración fue hace pocos días. La estructura – que se inaugurará en noviembre de 2022 – alcanzará unos 17 metros por debajo del nivel de la fortaleza y albergará la nueva entrada del museo, una galería de exposiciones de arte, una cafetería y oficinas.
Los arqueólogos pudieron recolectar muestras de material orgánico – y específicamente carbones – atrapados dentro del yeso utilizado para construir la pared. Las muestras se están analizando en el Instituto de Ciencias Weizmann.
“Esto nos va a ofrecer respuestas no solo sobre esta área específica sino para muchas otras en la Ciudad Vieja si vemos que el yeso utilizado es similar”, comentó Silverberg.
Ha habido muchas otras revelaciones a medida que avanzaban las excavaciones. Imagínese hace unos siglos, un soldado otomano mientras camina a lo largo de la muralla de la ciudad de Jerusalén. Quizás fue una noche de invierno larga y con mucho viento, quizás un día de verano, justo después del amanecer. Mientras miraba hacia el exterior de la ciudad para escudriñar el horizonte, en un momento de distracción, dejó caer la pipa de tabaco que estaba fumando para pasar las largas horas de patrullaje.
Muchos años más tarde, esa pipa de tabaco, junto con algunos fragmentos de cerámica que datan de la época del rey bíblico Ezequías del siglo VIII AEC, se encontraba entre los artefactos desenterrados en la excavación que acompaña el trabajo de construcción del nuevo pabellón.
El proyecto de renovación del museo también incluirá una nueva exposición permanente que presentará la historia de Jerusalén a través de artefactos milenarios y tecnología pionera.
Mientras tanto, las obras de construcción de la Puerta de Jaffa ya ofrecen oportunidades únicas para profundizar en los misterios arqueológicos de la ciudad.
Esclareciendo enigmas en la Torre de David.
(Foto: MARC ISRAEL SELLEM)
En Israel, por ley, cualquier proyecto de desarrollo debe ir precedido o acompañado de una excavación arqueológica.
En Jerusalén, y especialmente en un área tan rica en historia como los terrenos adyacentes a la Ciudad Vieja, la oportunidad de excavar es única, dijo Silverberg.
“En el último año y medio, hemos tenido la oportunidad de ir por debajo del piso moderno y exponer muchos elementos arqueológicos”, dijo. «Esta es realmente una ocasión única que ocurre una vez por generación».
El área había sido excavada por el arqueólogo británico Cedric Norman Johns en la década de 1920, quien llevó un diario y documentó algunos de sus hallazgos en imágenes. El material ayudó tanto a los arqueólogos como a los arquitectos a planificar el trabajo.
Sin embargo, se descubrieron muchos elementos nuevos, incluidos artefactos, una piedra con una inscripción árabe y una fecha – 1212 – y una letrina medieval.
Al diseñar el nuevo edificio, preservar el paisaje de la zona ha sido una de las principales prioridades, según el arquitecto Etan Kimmel de Kimmel Eshkolot Architects, a quien se le ha encomendado el proyecto.
“Ha requerido cinco años de trabajo de diseño”, señaló.
“Era importante que el nuevo pabellón se integrara en el paisaje pero al mismo tiempo no apareciera oculto en él, pretendiendo ser antiguo cuando es moderno”.
El resultado, enfatizó, es una estructura muy contemporánea que recibirá a los visitantes provenientes de la zona de Mamilla mientras se integra en el entorno, “como una poesía entre lo antiguo y lo nuevo”, apuntó.
Cuando comenzó la construcción, los arquitectos tuvieron que consultar constantemente con los arqueólogos.
“En un lugar tan sensible, no se puede simplemente pensar en una gran solución de ingeniería sin considerar lo que hay debajo”, dijo Kimmel.
Cuando se le preguntó con qué frecuencia necesitaban cambiar de plan ante las necesidades arqueológicas, respondió «todos los días».
El pabellón de entrada Patrick y Lina Drahi de acero, piedra y vidrio hundidos debe estar listo en aproximadamente un año, justo después de que el Museo de la Torre de David también inaugure su nueva exposición permanente.
“Después de más de tres décadas, ya era hora de una renovación”, dijo Eilat Lieber, directora y curadora en jefe del museo. “Para nosotros era importante no solo renovar la exposición, sino también agregar la infraestructura necesaria para involucrar a las nuevas generaciones”.
“La pandemia nos ha presentado muchos desafíos, pero por otro lado nos ha permitido acelerar el trabajo”, señaló. “Ahora queremos estar preparados para dar la bienvenida a los turistas, que estamos seguros que pronto volverán”.
Traducción: Consulado General H. de Israel en Guayaquil
Fuente: The Jerusalem Post